Este tipo de estrategia basada en la estadística
consiste en definir unos parámetros que nos permitan decidir si en un
partido tienden a producirse más o menos de 2,5 goles.
Los parámetros que determinarán si interesa apostar en
un partido o no pueden ser bien distintos y pueden ampliarse para ir mejorando
la estrategia:
·
Media de goles marcados en los últimos 5 partidos en
casa del equipo local
·
Media de goles a favor en los últimos 5 partidos en
casa del equipo local
·
Media de goles en contra en los últimos 5 partidos en
casa del equipo local
·
Número de goles que marca el equipo visitante en sus
salidas.
·
Últimos partidos entre estos 2 equipos
·
Altas/bajas de jugadores importantes (especialmente
titulares en defensa o delantera)
·
Etc...
Una vez seleccionados los parámetros y valorada su
importancia (de 0 a 5 por ejemplo), debemos obtener un valor para cada
partido, compararlo con un valor base y apostar a aquellos partidos que lo
superen o queden por debajo (en función de cómo hayamos determinado el
valor base).
Mediante la creación de una fórmula basada en
parámetros que afectan al resultado, podemos limitar el número de
partidos válidos para apostar a ellos, de manera que se puedan
potenciar el número de aciertos.
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